Seguro que alguna vez has sufrido los problemas derivados del roaming al volver de vacaciones de algún país extranjero. O bien alguien te ha alertado sobre ello, motivo que te ha llevado a utilizar con extremo cuidado tu teléfono. Ahora, por fin podrás respirar más tranquilo cuando te muevas dentro de Europa, ya que podrás utilizar tu conexión a Internet y realizar llamadas sin preocuparte por la amenazante tarificación extra en la factura.
Esto se debe a que a partir de este 15 de junio, el roaming desaparece de Europa. Así, aquellos usuarios europeos que viajen a otro país de Europa, no tendrán que pagar de más por llamar o conectarse a la red a través de su tarifa.
El fin del roaming supone el fin del sobrecoste, pero habrá límites y detalles a tener en cuenta
Lo primero que hay que destacar es que no habrá que “tocar nada” en el smartphone. La tarificación del roaming se gestiona a través de la operadora, que será la que hará los cambios pertinentes desde su sede. El usuario, en principio, no tiene por qué preocuparse. El cambio será automático y se producirá el 15 de junio, como indicábamos antes.
Como mucho, y según cómo tengas configurado tu smartphone, deberás activar el consumo de datos en itinerancia.
Luego, lo que se pasará a cobrar en el territorio europeo es lo mismo que se te cobra en tu país donde tienes contratada tu línea. De hecho, si te excedes de tu límite contratado (si consumes todos tus datos o minutos) también se te cobrará lo estipulado en tu tarifa, como en tu país.
Hablando de límites, desde Bruselas han pensado en todo. Y es que las compañías podrán imponer un límite de datos y minutos consumibles dentro de Europa. En principio, este límite no debería ser un problema incluso para los usuarios que tengan contratados datos ilimitados, ya que las operadoras se encargarán de establecer una cantidad bien holgada.
Esto se realiza para evitar a la picaresca de contratar una tarifa (más barata) en un país y consumirla en otro. Es más, si la operadora detecta que en 4 meses se consume más fuera que dentro del país donde se adquirió el servicio, la compañía podría llegar a reclamar o a cancelar el contrato.
¿Se avecina una subida de precios en las tarifas regulares para compensar la pérdida del roaming?
Algunas compañías, como por ejemplo Vodafone, ya eliminó el roaming para sus clientes desde hace unos meses. Ahora, sin embargo, todas las operadoras de Europa tendrán que deshabilitarlo.
Este servicio se aplicaba por tal de liquidar los costes que suponía establecer una conexión entre el usuario y la operadora fuera de su país. Por tanto, al desaparecer esta tasa para el cliente (pero no el gasto, ya que nos seguiremos conectando), se especula con una posible subida de precios en las tarifas con la que compensar la pérdida de este sobrecoste.
Por el momento no parece ser que se vaya a dar el caso, pero conviene estar atentos. De igual forma, aquellos que tuviesen contratado alguna oferta en relación al roaming que supere la fecha en la que desaparece el servicio, deberían ponerse en contacto con su compañía para que le devuelvan o prorrateen el consumo no disfrutado.