La compañía de Zuckerberg está actualmente en su momento más delicado. El escándalo de Cambridge Analytica le ha estallado en los morros. Entre todo lo que se va sabiendo últimamente, han confirmado que Facebook espía nuestras conversaciones en Messenger. Aunque según ellos por motivos de seguridad.
Veremos como acaba el asunto, y está claro que Facebook no ha actuado de forma ética, pero los usuarios también tenemos una gran parte de culpa. La revolución 3.0 o 4.0, ya no sé por que número vamos, ha llegado demasiado rápido. No hemos sabido asimilar que lo que hacemos, decimos o miramos en nuestra vida digital, es igual de importante que lo que hacemos, decimos o miramos en nuestra vida real.
Zuckerberg ha dicho estas últimas horas que el affair con Cambridge Analytica puede afectar hasta 87 millones de usuarios. Pero ha añadido que casi toda la red social, unos 2.000 millones de perfiles, pueden haber dado sus datos a aplicaciones de terceros en caso de no tener bien configurada la cuenta. Qué barbaridad.
No sorprende saber que Facebook espía nuestras conversaciones en Messenger
A lo mejor habrá alguien que se escandalice por ello, pero en ActualApp lo dábamos por hecho. ¿Por qué sino habría una opción para cifrar los mensajes que convierte las conversaciones en secretas? Aunque claro lo que ha reconocido Facebook es quizás menos de lo que ocurre en realidad.
Todo el revuelo ha llegado a raíz de unas declaraciones de un portavoz de la compañía en Bloomberg. Obviamente no ha dicho que nadie espía nuestras conversaciones en Messenger, sino que ha hablado de “escaneo”.
En concreto ha dicho que “cuando envías una foto, nuestros sistemas automáticos la escanean para detectar coincidencias con imágenes conocidas de abusos infantiles”. Del mismo modo “cuando envías un link, lo analizamos en busca de malware o virus”. Finalmente ha añadido que en ningún caso se lee el contenido de los chats.
Hacerlo, en busca de ciertas palabras clave, permitiría a Facebook ofrecer una publicidad personalizada que se pagaría muy bien por parte de los anunciantes. Un caramelo muy jugoso, que Zuckerberg asegura no haber probado.
El problema es que viendo lo ocurrido estas últimas semanas es difícil poner la mano en el fuego por él. Y eso que nosotros somos gente que confiamos en su palabra. En el asunto sobre si Instagram escuchaba nuestras conversaciones, nos pusimos del lado de Facebook. Sinceramente no tengo claro si hoy haríamos este mismo artículo.
Este escándalo de Facebook ha abierto la caja de pandora
Sinceramente no tenemos ni idea de hasta donde llegará todo este escándalo. En Estados Unidos incluso han iniciado una campaña para eliminar la cuenta de Facebook. Sinceramente, incluso después de saber que espía nuestras conversaciones en Messenger, nos parece excesivo.
Además los expertos apuntan a que Google hace años que utiliza un método parecido con nuestras cuentas de Gmail. De hecho hasta este último verano, servían publicidad basadas en lo que “leían” en nuestros mensajes. Actualmente aseguran que solo analizan los emails en busca de malware o comportamientos ilegales.
Veremos como termina todo, pero la cosa no pinta demasiado bien. Internet es una jungla en la que se debe tener mucho cuidado. Quizás no hablamos tanto a nivel individual, pero si como comunidad. La manipulación a nivel de consumo, e incluso electoralmente, está encima de la mesa.