WhatsApp es un terreno incansable de mensajes, virus y estafas para aquellos que se dedican a propagar este tipo de fechorías con la clara intención de hacer dinero. No ha pasado mucho tiempo desde que os advertimos de un virus que se propagó por media América y que llegó a ciertas partes de Europa haciéndose pasar por una tarjeta regalo de Amazon. Hoy, volvemos a escribir las palabras ‘estafa’ y ‘WhatsApp’ en el mismo titular, y es que se ha propagado una supuesta nueva versión de WhatsApp que de descargarla, puede salirnos muy cara.
Te prometen un WhatsApp Azul con multitud de funciones nuevas… ¡y te suscriben a SMS de pago!
Los ciberdelincuentes vuelven a la carga valiéndose de WhatsApp para atrapar a los más incautos. Últimamente circula por las redes sociales una versión azul de WhatsApp que promete funciones nuevas y características que no podemos encontrar en el WhatsApp oficial, el verde de toda la vida. La idea de estos atacantes es atraete a descargar su versión, pero para ello debes introducir tu número de teléfono, que será suscrito a un servicio de SMS Premium de alto coste, es decir, un servicio de pago –y todo ello sin tú saberlo–.
Para que más personas piquen, en el momento que quieras acceder a este WhatsApp Trendy Blue debes invitar a 10 usuarios, agregando el número de teléfono de éstos y así propagar el fraude. Esto lo que hace es enviar un SMS a tus contactos notificándoles que han recibido una invitación para probar este supuesto WhatsApp, con un enlace que les redirige a la estafa anterior descrita y así aumentar la probabilidad de que la cadena se expanda.
Más vale WhatsApp oficial en mano que ciento volando
Para evitar que los fraudes de los SMS Premium te afecten, puedes llamar a tu compañía de telefonía para que desactiven esta opción y así estar seguro de no recibir estos mensajes a cobro revertido.
Como siempre, lo único oficial es lo que encontramos en Google Play, en iTunes o en la web oficial de WhatsApp. Todo lo demás puede estar sujeto a virus, malware o estafas como es este caso.
