Cuando llevas 15 películas de la misma saga a tus espaldas, podemos imaginar que es difícil encontrar un nuevo tema que tratar para sorprender al espectador. En el caso de One Piece, ya hemos visto géneros como el battle royale (en la anterior entrega, Estampida), las carreras (como en Dead End), películas que giran en torno a un personaje en concreto (como La Maldición de la Espada Sagrada o El Reino de Chopper en la Isla de los Extraños Monstruos) e incluso algo de drama oscuro en El Barón Omatsuri y la Isla Secreta. ¿Qué le quedaba a One Piece Film: Red por aportar a este shonen? El género musical.
Pero uno de los ganchos que Toei nos ha lanzado para acudir a ver la película no está tanto en el género, sino en un personaje (o dos, mejor dicho). Shanks es el gran reclamo de Film: Red, alguien del que todavía conocemos muy poco pese a llevar con nosotros desde el primer capítulo del manga.
ADVERTENCIA: A partir de estas líneas, te esperan spoilers tanto de la película como de los últimos números del manga de One Piece.
One Piece Film: Red – Un concierto que te atrapa (REPETIMOS: SPOILERS A CONTINUACIÓN)
Los tráileres publicados hasta la fecha a penas nos revelaban detalles de la película, más allá de que Uta –un nuevo personaje creado para esta cinta– es la hija de Shanks. Desde el primer momento ya nos dejan claro que Uta lleva la voz cantante de Film: Red, nunca mejor dicho, pero a diferencia de anteriores entregas, en los tráileres no nos presentaban «el enemigo» o «la amenaza» de la trama. Esto, a algunos espectadores nos hacía sospechar que, efectivamente, la propia Uta era la cara oscura de la aventura.
El arranque de Film: Red ya te indica de qué va a ir el asunto: estás en un concierto y aquí van a sonar varias canciones a lo largo del metraje. Si no te gusta que te interrumpan la acción con canciones, quizá no será tu película favorita de One Piece; sin embargo, consideramos que están bien implementadas y no se hacen pesadas, pues su duración tampoco se excede demasiado.
Mención especial al trabajo de Miree, la intérprete que pone voz a Uta en las partes cantadas tanto en el doblaje castellano como catalán, clavando a Ado (la cantante original japonesa) en todos los registros de las diferentes canciones. Esta película tenía que disponer de las canciones dobladas para una mayor cohesión con la trama y así ha sido, así que un aplauso a Selecta Visión por la parte que le toca, también. Eso sí, en ocasiones nos ha parecido que algunas adaptaciones de las letras están algo encorsetadas, presumiblemente por las limitaciones creativas impuestas desde Toei o la competencia que corresponda.
Por lo que respecta al grueso de la trama, One Piece Film: Red nos sitúa en Elegia, una isla donde se han reunido piratas, miembros del Gobierno Mundial, Marines y fans de Uta, pues la artista va a realizar su primer concierto con el que quiere «hacer feliz a todo el mundo» y «comenzar una nueva era». Algo que a priori podemos entender como metáforas, poco a poco vamos viendo que Uta piensa llevarlo a cabo a cualquier coste cuando, tras reencontrarse con Luffy y pasar un rato con él, éste y su tripulación deciden abandonar el concierto para proseguir su aventura en otros mares. Comenzamos a ser testigos del delirio de Uta.
La película va jugando con el misterio desde el principio para que el espectador se haga preguntas. ¿Cuál es el poder de Uta exactamente? ¿Por qué ha habido una transición tan brusca de una escena a otra? Conforme avanza el metraje, los personajes se adentran en Elegia y la trama nos revela parte del pasado de la cantante (que recientemente pudimos explorar en unos episodios especiales del anime), comenzamos a entender todos los misterios que rodean a la isla, su historia y a Uta.
Junto al apartado musical, los giros de guion son lo mejor de One Piece Film: Red. Y no hay solo uno, sino que desde mitad de la cinta hacia delante, nos topamos con varios que elevan el interés por la película mucho más que el que te pueda despertar la primera mitad.
Desfile de personajes que se agradecen ver de nuevo en One Piece
Pero otro apartado que nos ha llamado la atención, está en la curiosa elección del elenco que nos acompaña.
En la anterior película, Estampida, tuvimos una auténtica lluvia de cameos, pero sus participaciones fueron anecdóticas en la vasta mayoría de casos. En Red también nos reencontramos con muchas (menos) caras conocidas y con inesperadas cuotas de pantalla, como por ejemplo la de Blueno; entendemos que su poder convenía para la trama y de ahí que se haya recurrido a él, si bien en este caso en concreto el personaje cae en algunas contradicciones (hasta en dos ocasiones menciona que ya no puede usar su poder, para luego utilizarlo igualmente) o que ni siquiera tenga una línea de diálogo con Luffy pese a compartir escenas juntos, más cuando fue el enemigo con el que Luffy estrenó la técnica Gear Second, uno de los grandes momentos de toda la serie.
También se agradece la participación de personajes como Oven y Brulee, de los piratas de Big Mom, que también ocupan más minutos de lo que cabría esperar, y otros que parece que ya se han ganado una plaza asegurada en las pelis, como por ejemplo Bartolomeo, Law, Kizaru o Akainu.
Pero sin duda, el que más expectación ha levantado ha sido Shanks. El todavía misterioso personaje demuestra su poderío en los compases finales de la trama, la cual lleva de una manera ciertamente brillante ese «reencuentro pero no» con Luffy para no opacar el futurible momento en la obra original. Entendemos que tanto él como su tripulación son personajes que no se pueden exprimir todo lo que nos gustaría porque es algo que Eiichiro Oda, el autor, se estará reservando para el manga.
De esta manera, nos queda un Shanks que tampoco «se moja» demasiado, más allá de parecer quitarnos de encima esa teoría fan sobre sus intenciones oscuras o que finalmente fuese un villano. Porque sí, en Film: Red parece quedar claro que El Pelirrojo definitivamente es buena persona.
Donde Toei sí se la ha jugado ha sido en el golpe final de la película, adelantando la nueva transformación de Luffy de una manera no exageradamente explícita, pero lo suficiente como para arquear las cejas de los que solo sigan el anime hasta la fecha (donde todavía no se ha mostrado). Algo parecido sucedió en la película El soldado mecánico gigante del castillo Karakuri donde Luffy activaba el Gear Second pese a que en ese momento todavía no lo había usado (obviamente, entendiendo todos estos sucesos como fuera del canon de la serie).
Pero antes del golpe final, nosotros nos quedaríamos con el que creemos que es el momento más brillante de toda la película: la coordinación entre Yasopp y Usopp. Aprovechando que el foco mediático estaría en el vínculo de Luffy y Shanks, nos topamos de sorpresa con ese otro «reencuentro pero no» entre padre e hijo –haciendo uso de una especie de haki de visión un tanto inventado para la ocasión y sospechosamente conveniente– con el que comandan el ataque final entre todos los protagonistas.
Por otra parte, nos ha parecido que la aparición de otros personajes ha quedado verdaderamente desaprovechada, véase Big Mom, Katakuri, Califa o la transformación del Thousand Sunny (que suponemos que vendrá a sustituir a Chopper en lo que a venta de merchandising kawaii se refiere, porque el médico de los Sombrero de Paja está desaparecido en prácticamente toda la cinta). Luego, aunque tiene su momento clave, echamos de menos algo más de participación de Brook, siendo él el músico de la tripulación protagonista y siendo esta película un musical. El resto de la banda aprueba, a nuestro juicio, teniendo en cuenta la cantidad de personajes a los que «darles minutos».
Resumen de One Piece Film: Red
One Piece Film: Red ha roto, en cierta medida, la fórmula que más o menos venía repitiendo hasta ahora (la ausencia de un «villano» como tal, pese a que al final sí tenemos esa representación con la bestia Tot Musica, la incorporación del género musical a lo largo de la peli, el uso de personajes «blindados» como Shanks) y no le ha sentado mal.
Del dibujo tampoco podemos poner ninguna pega, aunque la animación en los momentos de combate es tan frenética que cuesta seguir el ritmo; no así el de las canciones -todo composiciones originales para esta obra, por cierto- que no desentonan en ningún momento. Mención especial a ese remix de la canción principal, New Genesis, con We Are, el primer opening de la serie, en el punto álgido de la peli.
Puntos positivos:
- Los giros argumentales.
- Presencia y aportación de personajes secundarios poco comunes.
- Las canciones / adaptación de las canciones / banda sonora.
- El casting de voces tanto en castellano como en catalán es el que recordamos.
Puntos negativos:
- Algunos personajes muy desaprovechados (¿Big Mom? ¿el Sunny?).
- Dinamismo tan exagerado en los combates que a veces cuesta seguir la escena.
- Aunque tiene un potente arranque con la canción New Genesis, la película te atrapa a partir de la segunda mitad.
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