Las arenas de Hearthstone vienen a ser una de las modalidades más aleatorias del juego (si excluimos la taberna, claro). Para el que no sepa exactamente de qué se tratan, una arena cuesta 150 de oro (o 1.49€). Al iniciar una no podemos empezar otra hasta terminar la vigente o abandonarla. Una vez empezada se nos ofrecerán 3 clases o personajes diferentes (aleatorios). Tenemos que escoger el que prefiramos, y empezará entonces la diversión: ¡Crear un mazo! De 3 en 3 nos irán apareciendo cartas del mismo tipo (comunes, épicas, legendarias a veces…) y la que seleccionemos se meterá en nuestro mazo. Las cartas serán neutrales o de la clase que hayamos escogido, por lo que no podremos tener un mazo de chamán con hechizos de mago).
Las arenas son un modo difícil y bastante aleatorio
Con el mazo terminado y listo para jugar, las aventuras de las arenas de Hearthstone no han hecho más que empezar. El objetivo es ganar tantas partidas como podamos (hasta 12 como máximo) sin perder 3. A más victorias, mayor será la recompensa que recibamos. Una vez explicado el funcionamiento, sólo queda ofrecer pequeños consejos que a la larga ayudarán a conseguir esas preciadas 12 victorias:
La curva como estilo de vida. Jugar en curva significa gastar todo el maná en cada turno para jugar de forma eficiente. En las arenas de Hearthstone es importanísimo, especialmente los primeros 3/4 turnos. Un esbirro de coste 2 en el turno 2, uno de 3 y uno de 2 en el turno 5… Por ahí van los tiros.
La sinergia del mazo importa. A la hora de escoger el mazo habrá decisiones que nos tienten más que otras. Quizás podemos elegir un 7/5 tocho pero que tiene al lado un 6/5 que hace algún efecto. Si podemos combinarlo con otra carta que hayamos escogido anteriormente, seguramente valga la pena arriesgarse con el 6/5. Especial atención a bestias, robots y dragones, o a qué tipo de inspirar tenga el personaje que hemos escogido .
No olvidar los mazos de los adversarios. La cantidad media de arenas que pasan de las 8 victorias es reducida, por lo que si se consiguen bastantes victorias es probable que encontremos el mismo adversario en la siguiente partida. En nuestra lucha por conseguir las 12 victorias hará falta recordar esa carta que tiene el otro que nos fastidió la partida y que no esperábamos para nada.
Las legendarias, ¡Cuidado! Cuando aparece la animación de que la carta que vamos a elegir es legendaria, a más de uno le da un vuelco el corazón. De repente tenemos que escoger entre Ysera, Ragnaros y Nad Paggle. Hay que tener en cuenta siempre que estamos en arena. Muchísima atención a la hora poner una legendaria en el mazo. Hay que escogerla útil, no la que mole más.
Esbirros más que hechizos. En las arenas mandan los esbirros, así que hay que priorizar antes que hechizos. Eso no quiere decir que no haya que escoger ninguno, pues un Fogonazo del mago puede cambiar el curso de una partida. La proporción de esbirros debería ser casi ¾ del mazo, aunque los hechizos que invocan esbirros también son útiles para counterear secretos como Reflejo Viviente.